miércoles, octubre 27, 2010

HASTA CUANDO COMUNIDAD CAMPESINA SAN MARTIN. SECHURA.- Aun sigue pasando el tiempo, los comuneros hombres y mujeres se curten por las inclemencias del sol, por su rostro cobrizo pasan los años preguntándose ¿Hasta cuándo?. ¿Volverán esos tiempos, cuando los comuneros defendían con todo el territorio comunal?, es casi imposible, porque sólo en el recuerdo queda el nombre de ese viejo indómito, transparente y leal consigo mismo, que supo enfrentarse con el poder, no se arrodillo ante nadie, legado que como ejemplo debe quedar Don Vicente Chunga Aldana.
La incertidumbre irrumpe la mente, embarga la nostalgia de aquella defensa del territorio comunal, de que sirvió tanto sacrificio, cuando hoy nos enfrascamos en férreas disputas, dos dirigencias, dos “presidentes”, dos elecciones, dos comités electorales que pugnan la legitimidad a costa de cualquier artimaña con tal de ser reconocidos por los comuneros y buscar su legalidad ante registros públicos.
Cuánto daño y en términos económicos para unos más que favorable por los faenones y las aceitas, -tomando como referencia a don Bieto y a Rómulo León-, en la venta indiscriminada de los terrenos, pocos hacen prevaler su poder económico o político, han amurallado nuestra ciudad, Sechura no tiene donde expandirse urbanísticamente. Tema que debe tratarse urgentemente, la comunidad ¿Es de unos pocos?, o ¿Es de todos los que hemos nacido aquí y otros que también tienen derecho?.
Pero el problema no radica allí, la empresa Vale (Vale do Rio Doce, Misky Mayo ó como quieran llamarla), ¿Respeta el contrato?, con la anuencia de la ilegalidad, no se respeta el derecho de todos los comuneros, mas quienes se aferran a un cargo inclusive sin respaldo de nadie, siguen dando autorizaciones como si fuera únicamente de ellos, como el que recién sale a la luz, más de noventa años para explotar nuestros recursos naturales, provecho American Potash. ¿Cuánto cuesta?. Y los comuneros siguen curtidos por el sol, viviendo a expensas de su sudor, lagrimas y sangre con míseros centavos que el patrón les paga pidiendo una oportunidad, un puesto de trabajo.
Sin lugar a dudas no hay que ser adivinos para PRONOSTICAR, que nos depara el futuro sin recursos naturales, medio ambiente contaminado, sin trabajo para los jóvenes, la ilegalidad quiere asegurarse y asegurar bien los bolsillos y ese es el interés de permanecer cuatro periodos sin convocar a los comuneros a elecciones, pues nos enteramos que una medida cautelar pone en jaque a la comunidad de Vicente Chunga Aldana y entra a tallar un tercer personaje.
Para el colmo de la desfachatez, ciertos individuos arañan permanecer más tiempo, no como dirigentes comunales, pues nadie les cree, si no como titulares de la Fundación Comunal, ¡oh¡ sorpresa al vencer su inscripción registral hacen lo posible por buscar ampliar sus nefastos negocios en registros públicos tratando de legalizar la ilegalidad antes del retiro sin pena ni gloria del actual presidente del Gobierno Regional.
En la Fundación Comunal son grandes las cantidades de dólares que ingresan por las regalías que corresponden, empresas como Vale, American Potash, Cemento Pacasmayo, Juan Pablo Quay aportan a las arcas comunales, merced a ello se ejecutaron pequeñas obras algunas inconclusas, como en Puerto Rico Bayóvar o Nueva Esperanza Sechura, a hora nos damos cuenta el interés de permanecer más tiempo. Amor al chancho o a los chicharrones.
Y esto sin contar las grandes cantidades de sal mineral del desierto sechurano que poseemos en que sale a vista y paciencia de todos, enormes vehículos cargados con destinos diferentes por el norte y sur del territorio comunal los vemos como se llevan nuestros recursos naturales y si le sumamos el yeso y las diatomitas, que mas podemos decir.
Mientras tanto la gloriosa Comunidad Campesina San Martin, continua acéfala, sin conducción, sin un timón que dirija en un solo horizonte, debe convocarse a la brevedad posible elecciones, pero mientras exista esa medida cautelar en el poder judicial, seguiremos esperando.
Mas el tiempo inexorablemente se acrecienta en la piel curtida de los comuneros y comuneras, esperando la solución definitiva a un problema que por la terquedad de pretender entornillarse mucho daño a causado. El sechurano piensan en el más grande de los defensores de su Comunidad, si estuviera entre nosotros ya hubiera muerto nuevamente de la vergüenza de haber conocido tanta gente inescrupulosa.
Emprendamos una campaña por la dignidad comunal. No hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista. Nuestra comunidad merece el respeto

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